¿Cómo decirle a tu jefe que vas a renunciar?

Ya me siento muy cansado de mi empleo, no es la paga, ni el jefe, mucho menos el ambiente, simplemente he decidido salirme porque quiero hacer nuevas cosas, necesito preocuparme mucho más por mi vida y mis metas. Sin embargo, no sé cómo decírselo a mi jefe, siento que él se lo tomará personal y pensará que soy desagradecido con él, pero en verdad, lo respeto y admiro mucho, ¿de qué forma puedo renunciar sin que mi jefe se disguste conmigo?

¿Ya estás cansado de tu trabajo, ya no soportas a tu jefe o acaso encontraste una mejor oferta? Lo cierto es que quieres renunciar y sientes que no hay mejor momento para hacerlo que este.

Hay trabajos agobiantes, que consumen tu tiempo y con ello tu alma, lo peor que puedes hacer es seguir ahí y lo sabes, solo que por mucho tiempo no pudiste tomar la decisión de renunciar, quizás por las circunstancias económicas en las que estabas o quizás porque una parte de ti sentía que le debía mucho a la empresa a la cual le habías trabajado durante tanto tiempo.

Lo cierto es que no le dejes nada si ella está llevándose lo más preciado que tienes, que es el tiempo, a cambio de nada. Antes de que digas las palabras mágicas, déjame darte 6 consejos que te echarán una mano en el proceso. 

#1. Vamos a ser súper diplomáticos en el proceso


Tu trabajo vale, también vale la reputación que desees dejar en el lugar donde solías trabajar y por ellos es importante que cuides las apariencias en el proceso, creerás que te estoy animando a ser hipócrita, pero no, se llama “ser diplomático” y actuar de la forma correcta, en el momento correcto, con las personas correctas cuidando los intereses y las relaciones que se interconecten en el proceso.

Para ello debes generar interés positivo en ti a partir de la realización de un trabajo excelente con tus superiores y tus compañeros.

#2. Notifícalo con tiempo


Este paso es muy importante para cuidar el primero que te mencioné, para que vean tu genuino interés en el bienestar de la empresa es importante notificar tu salida con antelación, al menos 1 semana antes de retirarte, y así tu puesto no se quede vacío de forma inesperada.

Sé que ya no trabajarás allí pero es importante dejar una buena impresión de ti mismo, incluso en esta situación. Esto se puede hacer de forma verbal, directamente con el jefe, lo ideal es que él o ella sea el primero en saberlo, así evitas que circulen típicos chisme de oficina que bien pueden causar algunas mal entendidos.

#3. No dejes nada pendiente


Recuerda que el lugar de dónde vienes siempre será la primera referencia que indagarán si alguien se interesa por darte un nuevo empleo en el futuro, por eso, es importante que si vas a cerrar este capítulo de tu vida no dejes nada inconcluso.

Asegúrate de tener todos tus pendientes al día, de modo que tu salida no le genere trabajo extra a alguien más y que ello pueda ocasionar malestar y comentarios negativos. 

#4. Si te vas a quejar, hazlo de forma inteligente


Es totalmente comprensible si te sientes inconforme o disgustado por tu ambiente de trabajo, tu salario o tus compañeros, bien estás en tu derecho de expresarlo pero antes de que sueltes la lengua debes hacerte la siguiente pregunta: ¿Me serviría de algo? ¿Cambiaría algo? Si no es realmente necesario, intenta mantener las quejas al mínimo, y plantéalas de forma productiva, como una recomendación o sugerencia.

#5. Habla en buenos términos


Es importante que nos mostremos agradecidos por haber sido recibidos en ese trabajo durante el tiempo que le dedicamos y por todo lo aprendido, y es que el mundo da muchas vueltas y no sabemos si algún día nos tocará regresar, por lo que no será mala idea dejar la puerta entre abierta.

Si tienes dudas de cómo iniciar, bien puedes plantear la situación de la siguiente manera: «Me siento agradecido por todo lo que he aprendido con ustedes, pero siento que ya mi ciclo aquí ha terminado y estoy iniciando una nueva etapa…» «…esta semana estaré atendiendo mis pendientes y a partir de X día terminará mi tiempo aquí».

#6. No pierdas el respeto ni la admiración por él


Hazle entender que aunque ya no laborarás en su empresa, siempre vas a admirarlo y a respetarlo, dile que valoras mucho la oportunidad que te ha brindado para permitirte desarrollar de forma positiva dentro de la organización, hazle saber que has aprendido mucho y que estás muy agradecido con él.